John Cena regresa a WWE para un total de siete apariciones consecutivas en SmackDown, comenzando este viernes por la noche en Hershey, Pensilvania.
Cena siempre tendrá una puerta abierta en WWE, pero ahora es algo más extenso porque si aún no se enteraban, sigue la huelga en Hollywood, entonces el ex campeón de WWE transformado en actor no ha podido iniciar nuevos proyectos, por lo que debe aprovechar el tiempo libre ¿Que hará WWE con su persona?
La mejor posibilidad de cualquier posible elección creativa para Cena en su regreso, y quizás la favorita de gran parte del público es ver que tenga una carrera con el número 17 de campeonatos mundiales en su historia, aunque claro ¿Parece ser algo tan improbable que incluso discutirlo puede sentirse inútil?
No exactamente.
Aquí es cuando recuerdas que WWE está en medio de una iniciativa para reescribir los libros de historia con hazañas modernas.
Bianca Belair se convirtió en la campeona femenina que más tiempo ha reinado en casi dos décadas. Gunther está a días de romper la marca como el campeón intercontinental con el reinado más largo en la historia. Roman Reigns hace historia cada mañana que se despierta como el campeón universal indiscutible de WWE.
En ese contexto, sería ridículo que WWE no considerara al menos poner un título mundial en Cena y dejar que su mayor embajador se hiciera cargo de ser el único con 17 reinados mundiales, bueno, al menos reconocidos por WWE, Ric Flair y Sting suman 21, pero WWE no reconoce a varios…
Claramente, él no sería el que derrotaría a Reigns y terminaría con esa carrera monstruosa como campeón, pero hay una manera de obtener un título mundial nuevo para Cena. Una forma enrevesada y desordenada, pero una forma, al fin y al cabo.
Comienza con Shinsuke Nakamura aprovechando la lesión de Seth Rollins en Payback. Damian Priest usa su maletín de Money in the Bank y reclama el título.
Cena lanza un desafío desde allí, gana el oro después de la interferencia fallida de Finn Balor que intensifica los problemas dentro de The Judgment Day, y le otorga a un Rollins sano una oportunidad de ganar su título, tal vez tan pronto como Crown Jewel a principios de noviembre, evento donde Cena está anunciado.
Eso logra el objetivo de que Cena rompa el «récord», proporciona a WWE un evento principal de alto perfil en Arabia Saudita y ofrece un contexto histórico para su regreso a la compañía mucho más allá de unas vacaciones de ocho semanas de su trabajo diario en Hollywood.