En las últimas noticias del caso de Naomi y Sasha Banks abandonando WWE porque probablemente tenían razón, Dave Meltzer del Wrestling Observer Radio informó que los planes para el torneo para coronar nuevas titulares por equipo, ya que los títulos por pareja de mujeres quedaron vacantes, están oficialmente «muertos».
El hecho de que Banks y Naomi se retiraron por diferencias creativas con la gerencia sobre el trato que tienen estos los títulos, solo para que WWE luego retrocediera en los planes de realizar un torneo para decidir nuevos campeones, esencialmente prueba el primer punto de las luchadoras descontentas.
La compañía ha sido tan evasiva y perezosa con los títulos por equipo de mujeres desde su creación en 2018 que nada sobre su falta de previsión con respecto a estos es una sorpresa, en absoluto.
Los cinturones, que a menudo se otorgan a dos estrellas que no son un equipo como tal, por que no tienen nada mejor que hacer, han sido objeto de reservas inconsistentes e indiferencia por parte del equipo creativo de WWE durante tanto tiempo, que incluso una estrella estelar de la división femenina como Banks y una veterana respetada como Naomi no pudieron devolver credibilidad a estos.
Esa frustración y darse cuenta de que nada de lo que hicieran cambiaría la mentalidad creativa, comprensiblemente, llevó a Banks y Naomi a irse.
Al final del día, sin duda, pero sin duda, WWE está haciendo todo lo que está a su alcance en este momento para demostrar que sus estrellas fugitivas al menos, tenían razón en lo que respecta al tratamiento descuidado de los títulos.
